viernes, noviembre 09, 2007

Día 89, viernes

He leído por estos días que los japoneses son los que menos hacen el amor en el mundo, lo que debe desilucionar un poco a los que somos adeptos a las niponas. Lo que me pregunto es que, si es cierto lo de los japoneses, por qué existe un kamasutra japonés con poses como: la lombriz de tierra que se fue al espacio sin decir ni adiós, la cucaracha zarrapastrosa, la urraca que hurtaba monedas y termino atracando bancos a mano armada, el pulpo que se comió las patas y después pidió ocho pensiones de invalidez, el pequeño saltamontes chiripitiflautico y su maestro manco, el lago del cisne sonrojado, la fría caverna inaccesible del monte Fujitsu, la minúscula nube del cielo que provoco la riada de los 500 años y, por supuesto, el orejon que se compro unos zapatos horrendos para desviar la atención de sus orejas y al salir de la zapateria escucho: mira el orejón, que zapatos tan horteras lleva.